Desde el lunes 15 de marzo, en diferentes puntos del Perú, transportistas de carga pesada llamaron a un paro nacional indefinido. Entre sus principales reclamos destacan la reducción de los precios de los combustibles, la eliminación del Impuesto Selectivo al Consumo, la suspensión de los peajes (en Chiclayo y Piura) y la aplicación de una amnistía general a las multas impuestas por la SUTRAN.
Este problema tuvo un impacto directo sobre las exportaciones peruanas, las cuales disminuyeron de forma inmediata. Cabe resaltar que el lunes no se vio el efecto, pues terminaron de embarcarse los contenedores que habían llegado el fin de semana. En el caso puntual de las exportaciones agrícolas peruanas, se observó que durante los dos primeros días de la semana se enviaron menos contenedores. El lunes, se embarcaron 223 contenedores, 6% más que en el 2020 (considerando que fueron los primeros días de cuarentena en el Perú), pero 37% menos que en el 2019 (año en que no hubo contratiempos). El martes fue más evidente el impacto del paro, con solo 15 contenedores embarcados con productos agrícolas, 93% menos que en el 2020 y 96% menos que en el 2019.
Los principales alimentos peruanos que se están perjudicando con el paro son la palta, la mandarina y la granada. Los dos primeros están iniciando su campaña, mientras que el último está a mitad de la temporada. En esta época, en una semana promedio se envían entre 400 y 500 contenedores; sin embargo, se estima que esta semana se enviarán menos de 300 contenedores.
