Luego de poco más de un mes de haber comenzado la campaña de mango, la cual va de octubre a marzo, esta ha generado grandes expectativas en comparación a similar periodo pasado. Y ello pese a que al final de la campaña anterior —en marzo—, Chile (uno de los principales compradores) cerró las puertas a esta fruta de procedencia peruana debido a la presencia de la plaga Queresa coma en los despachos de dicho producto.
Ante esta situación, el Perú informó sobre las medidas correctivas contra las queresas y logró reapertura del mercado chileno meses después para la actual campaña. Sin embargo, en esta etapa incial, el principal comprador ha sido Canadá, con un total de 1,184 toneladas por US$ 2 millones, lo cual significó un aumento de 197% en el volumen y 165% en el valor. Chile pasó de ser el principal importador con US$ 1,275 millones en la campaña pasada a tan solo US$ 160 mil en esta, lo cual significó una caída de 87%. Todo ello como consecuencia de los problemas fitosanitarios presentados a inicios del año.
Asimismo, luego de distintas negociaciones encabezadas por el SENASA, este producto ya cuenta con protocolos fitosanitarios para más de 64 mercados internacionales. Demanda que es cubierta gracias a la producción de más de 18,853 hectáreas diversificadas en distintos sectores del país.
Cabe resaltar que, además de las negociaciones para la obtención de los permisos fitosanitarios, SENASA brinda el respaldo de estos permisos mediante distintas actividades, como la certificación de los lugares de producción, la inspección a las plantas de procesamiento, y el tratamiento hidrotérmico, lo cual es requerido para ciertos países.