En este año, la canasta agroexportadora peruana ha venido sufriendo distintos problemas a causa de los cambios climáticos, los cuales han perjudicado el inicio a tiempo de campañas de distintos productos, debido a las consecuencias que estos conllevan, como la aparición de plagas.
Uno de estos productos fue el mango, el cual —pese al mal panorama esperado— aún no ha presentado señales tan negativas. Sin embargo, se debe tener en cuenta que para los próximos meses, en el caso del mango fresco, estas plagas podrían llegar a afectarlo en mayor medida, dado que el exceso de lluvias haría que estos se pudran más rápido de lo habitual y con ello perjudicar su exportación.
En lo que va de la campaña de mango, las remesas de la fruta fresca han sumado 2,846 toneladas, representando el 52% de todos los envíos, siendo esto 4% mayor que el 2022; mientras que las exportaciones de mango congelado han totalizado 1,732 toneladas, apropiándose del 32% del total exportado, 2% menos que el año pasado.
Para los próximos meses, esta brecha de participación de ambas presentaciones se acortaría, dado que los agroexportadores podrían
aprovechar la presentación del producto congelado para mitigar el problema de la putrefacción del mango fresco, y con ello este pueda llegar en óptimas condiciones a sus destinos, siendo el principal los Estados Unidos. En este mercado, la presentación en fresco representó el 56% de participación, mientras que la congelada llegó al 36%.